ACTIVIDAD, INDICACIÓN QUIRÚRGICA Y VALIDEZ DIAGNÓSTICA DE UNA UNIDAD DE ALTA RESOLUCIÓN DE TIROIDES Y PUESTA EN MARCHA DEL COMITÉ MULTIDISCIPLINAR DE PATOLOGÍA DE TIROIDES.


Objetivos:
El diagnóstico y seguimiento de la patología nodular tiroidea y del cáncer diferenciado de tiroides se ha incrementado exponencialmente en la última década. Las consultas de acto único o de alta resolución de tiroides (UART) han demostrado recientemente su viabilidad y coste efectividad.
El presente trabajo pretende evaluar la actividad, indicación quirúrgica y validez diagnóstica de las técnicas realizadas en la UART en coordinación con la puesta en marcha del Comité Multidisciplinar de Patología de Tiroides (CT).

Material y métodos:
Estudio prospectivo observacional en el total de pacientes remitidos a la UART desde Octubre 2014 a Diciembre 2015; así como en aquellos pacientes remitidos al CT para evaluación de cirugía por cualquier causa.
Se recogieron datos clínicos, bioquímicos y de función tiroidea, ecográficos, resultados citológicos-PAAF; así como postquirúrgicos en aquellos pacientes intervenidos.

Resultados:
Durante el periodo evaluado se realizaron en la UART 1.832 consultas (634 -21,8%- como primeras visitas) con una edad media de 59±11 años, 81,7% mujeres. Se realizaron 480 PAAF guiadas por ecografía (Eco-PAAF), con un 3,7% de insuficientes para diagnóstico.
Del total de pacientes evaluados se remitieron para valoración quirúrgica por parte del CT 154 pacientes (8,4%) – 82,5% por patología nodular, 14,3% por hiperparatiroidismo y un 3,2% por recidiva tumoral ganglionar-. Del total de pacientes remitidos al CT un 80,5% eran mujeres, siendo significativamente más jóvenes (55±14 años; p<0,05) que la población general evaluada en la UART

De los 127 pacientes remitidos al CT por patología nodular 5 pacientes (3,9%) fueron rechazados por criterio de edad. Un 61,5% presentaban citologías-PAAF compatible con benignidad (Bethesda-II), 6,6% atipia de significado incierto (B-III), 16,4% proliferación folicular (B-IV), 1,6% sospecha de malignidad (B-V), 10,7% compatible con malignidad-carcinoma papilar de tiroides (B-VI), y 3,3% repetidamente insuficiente para diagnóstico (B-I).
A fecha de 31 agosto 2016; 78 pacientes habían sido intervenidos (63,9%). La histología confirmó la benignidad de las lesiones en un 74,4% de los pacientes, de los cuales 5 pacientes presentaron como hallazgo incidental microcarcinoma papilar sin características de agresividad (tamaño medio 0,50±0,29 cm).
Al comparar aquellos pacientes con histología maligna versus benigna no se observaron diferencias significativas en edad, sexo, antecedentes familiares o personales ni en el tamaño nodular por ecografía. Sin embargo, en un 73,7% de los casos la malignidad del nódulo fue sospechada por las características ecográficas, p<0,001. Además, aquellos pacientes con histología maligna presentaban con mayor frecuencia hipotiroidismo y características sospechosas de malignidad por ultrasonidos en el análisis bivariado (microcalcificaciones, hipoecogenicidad marcada, y mayor altura que anchura); p<0,05. Sin embargo, en el análisis multivariante tan solo la presencia de microcalcificaciones por ultrasonidos mantuvo la significación estadística β=1,52, error estándar=0,75, p<0,05.

La validez diagnóstica de la citología-PAAF (para las categorías B-II,V y VI) frente al resultado histológico definitivo fue muy alta sin observarse resultados falsos negativos (Tabla 1). El índice de concordancia entre ambas fue muy elevado: índice Kappa (IC95%) = 0,91 (0,79-1,03), p<0,001. De las citologías-PAAF diagnosticadas como B-IV fueron confirmadas como carcinomas diferenciados de tiroides en un 31,3% de los casos. Finalmente, el área bajo la curva ROC como indicador integrado de la capacidad diagnóstica de la PAAF fue de 0,947 (IC95%: 0,899-0,994) (Figura 1)

Conclusiones:
Los resultados obtenidos, validez diagnóstica de las técnicas realizadas e indicación quirúrgica en una UART en coordinación con el CT son semejantes a los descritos previamente en la literatura.
El presente estudio confirma la asociación de las características ecográficas sospechosas (microcalcificaciones) y la presencia de hipotiroidismo con un mayor riesgo de malignidad en la patología nodular tiroidea.
La puesta en marcha de este tipo de unidades es una alternativa viable y coste efectiva a la hora de diagnosticar la patología tiroidea maligna.