Objetivos: evaluar los beneficios de un entrenamiento de ejercicio físico regular en pacientes con diabetes tipo 1 y 2 a lo largo de 4 meses, comparando los cambios producidos con un grupo sin entrenamiento.
Métodos: Estudio antes-después con grupo control no equivalente. Pacientes de 18-75 años seguidos en la consulta de endocrinología de El Bierzo o Pamplona, diagnóstico de diabetes tipo 1 o 2 sin ingresos en los últimos 3 meses.Se asignaron según su inscripción a unentrenamiento físico supervisado 1-3 veces/semana de 4 meses de duración (Programa “Camina por la diabetes”)o a las recomendaciones habituales de la consulta de endocrinología. Se compararon los cambios en Hemoglobina glicosilada, otros factores cardiovasculares, calidad de vida (SF36), ejercicio realizado (cuestionario IPAQ). Los datos se analizaron mediante la Q de Cochrane y ANCOVAS de medidas repetidas (controladas por sexo y edad)
Resultados: Se incluyeron 28 hombres y 10 mujeres, 10 en el grupo control y 28 en el grupo de intervención, con una edad media de 56.14 años (SD: 9.4). 8 pacientes del grupo de intervención fueron excluidos por acudir a menos del 50% de las sesiones.
Ambos grupos incrementaron la actividad física semanal, pero sólo fue significativa en el grupo de intervención (4287.94 MET-min/sem al inicio versus 8865.78 Met-min/sem al final de la intervención; p=0.025). Se encontró una mayor bajada de peso, IMC y cintura abdominal en el grupo de intervención (- 2.2kg, -0.69kg/m2, -6.0 cm) que en el control (-0.07 kg, -0.01 kg/m2; +0.62 cm). No se observaron diferencias significativas en HbA1c, colesterol, triglicéridos u otros parámetros metabólicos.
La satisfacción con el programa de ejercicio y los objetivos conseguidos fue mayor en el grupo de intervención (medias de 5.57 y 5.32) que en el control (medias de 4.22 y 3.11; p=0.042 y p=0.001) así como las mejoras en calidad de vida – funcionamiento físico.
Conclusiones: El uso de programas de ejercicio físico supervisado puede ayudar a mejorar parámetros relacionados con el peso y la obesidad abdominal en pacientes con diabetes tipo 1 y 2, frente a los escasos cambios obtenidos en recomendaciones de uso habitual.