EVOLUCIÓN ATÍPICA DE UNA TIROIDITIS SUBADUDA DE QUERVAIN


Introducción
La tiroiditis subaguda granulomatosa o de De Quervain es una entidad poco frecuente (< 5% de la patología tiroidea) y su evolución típica consiste en una fase de hipertiroidismo, seguida de eutiroidismo e hipotiroidismo posterior, con restauración de la función tiroidea, aunque un 5% desarrolla un hipotiroidismo permanente. En la mayoría de los pacientes el cuadro clínico dura entre 2-4 meses. Existe escasa evidencia sobre la recurrencia de la tiroiditis subaguda. Diversos estudios han encontrado tasas entre 1,6 y 4% produciéndose a los 6-21 años del episodio inicial.

Caso clínico
Se presenta el caso de una paciente de 36 años con antecedentes de migraña en tratamiento con zolmitriptan y aneurisma de AC media izquierda embolizado, que acude a urgencias por dolor cervical, astenia, mialgias y fiebre de hasta 40º de dos semanas de evolución, acompañado de palpitaciones, sudoración y pérdida de peso. Había recibido tratamiento antibiótico por farinfoamigdalitis un mes antes sin mejoría. A la exploración: bocio II de consistencia firme a expensas de LTD, sin palparse nódulos ni adenopatías. En la analítica se objetivó TSH 0,092 µU/ml, T4L 1,82 ng/dl y PCR elevada, iniciándose tratamiento con AINES con escasa mejoría, ingresando posteriormente en Medicina Interna. En el ingreso se completó el estudio presentando anemia normocítica normocrómica, VSG elevada (85 mm) y autoinmunidad tiroidea negativa. La gammagrafía mostró tiroides globalmente aumentado de tamaño, con bajo acúmulo del trazador y en la ecografía se observó tiroides ligeramente aumentado de tamaño, con ecoestructura heterogénea e imágenes pseudonodulares hipoecogénicas, sin aumento de la vascularización. Se inició tratamiento con corticoides (metilprednisolona 60 mg) y β-bloqueantes, con notable mejoría clínica en 48 horas. Recibió tratamiento durante 3 meses en pauta descendente y dos semanas después de suspenderlo presenta de nuevo cuadro clínico compatible clínica y bioquímicamente con tiroiditis subaguda. Se reinicia la corticoterapia con un descenso más progresivo y tras 6 meses de tratamiento (en ese momento recibía metilprednisolona 4 mg y propanolol 40 mg) comienza nuevamente con dolor cervical, fiebre y malestar general ingresando en Endocrinología para estudio. Se objetiva hipertiroidismo (TSH 0,007 µU/ml, T4L 2,64 ng/dl, T3L 0,50 ng/dl), con elevación de VSG (83 mm), PCR (11,63 mg/dl), tiroglobulina (320,1 ng/ml) y Ac Anti tiroglobulina IgG (512,6 UI/ml) y con Ac. antiperoxidasa y Ac antireceptor de TSH negativos. La gammagrafía y ecografía tiroideas fueron similares a las previas, la EcoPAAF fue compatible con tiroiditis subaguda, con histiocitos epitelioides formando granulomas y células gigantes multinucleadas y la DMO normal. Se aumentó metilprednisolona a 8 mg con mejoría clínica. Al alta se realizó descenso progresivo de la dosis de corticoide suspendiéndose definitivamente a los 2 meses, permaneciendo hasta el momento asintomática y eutiroidea.

Comentario
La recurrencias en las tiroiditis subagudas se producen en un porcentaje reducido de pacientes y generalmente años después del episodio inicial. Se presenta el caso de una tiroiditis subaguda de evolución atípica, con una duración más prolongada de lo habitual y dos recurrencias en el primer año. No están claros los factores que pueden favorecer las recurrencias; algunos estudios las han relacionado con menor duración del tratamiento corticoideo, mayor rapidez en la disminución de la dosis y con la presencia de anticuerpos, aunque los resultados son controvertidos.