Una evolución no esperada


Descripción del caso: Paciente de 54 años fumador crónico, hábito enólico. Antecedentes de Dislipemia. Acude en febrero de 2012 a la consulta de Medicina interna para valoración de una fiebre de origen desconocido.

Exploración y pruebas complementarias: palidez mucocutánea. Auscultación pulmonar: murmullo vesicular conservado. Auscultación cardiaca normal, no se escuchan soplos ni extratonos. No edemas en EEII. En la exploración abdominal se palpa una masa en hipocondrio izquierdo.
Dados los hallazgos de la exploración, se solicita analítica de sangre y pruebas de imagen:
Prueba de laboratorio: leucocitosis, hemoglobina de 10 g/dL, proteína C reactiva (PCR) 177. El resto de los parámetros analizados fueron normales.
Rx de tórax sin alteraciones de interés.
Ecografía abdominal gran tumoración sólida en glándula suprarrenal izquierda, lobulada de aproximadamente 15 x 10 x 9 cm de diámetro, con posible infiltración/compresión de la superficie anterior del polo superior del riñón izquierdo, sin signos de litiasis ni uropatía obstructiva.

Diagnóstico diferencial:
– Adenoma suprarrenal
– Angioleiomioma
– Carcinoma suprarrenal.

Diagnóstico definitivo: dados los hallazgos de las pruebas complementarias, se decide realizar TC toraco-abdómino-pélvico (TAP) que confirma la presencia de una masa en celda suprarrenal izquierda compatible con neoplasia e infiltración tumoral de riñón izquierdo y bazo. También describe la presencia de adenopatías retroperitoneales. Otros hallazgos: enfisema pulmonar centrolobulillar y parasectal y un nódulo inespecífico en lóbulo inferior del pulmón derecho.
Se deriva a Urología, quienes intervienen quirúrgicamente al paciente realizando una suprarrenalectomía izquierda laparoscópica + linfadenectomía retroperitoneal izquierda + nefrectomía izquierda (el análisis anatomopatológico de la pieza se describe como carcinoma adrenal cortical izquierdo) y a cirugía torácica (quienes realizan segmentectomía atípica)
A lo largo del seguimiento la enfermedad evoluciona apareciendo metástasis en glándula adrenal contralateral (precisó adrenalectomía derecha en 2013).
Según avanza el tiempo y según progresa la enfermedad, el paciente sufre un episodio de hemoptisis grave, que precisó ingreso y tratamiento de radioterapia (siendo efectivo), y dos de pancreatitis, que también requieren ingreso hospitalario.
Actualmente el paciente se encuentra estable, las lesiones mediastínicas no reflejan cambios de tamaño de interés. No han aparecido lesiones en otras localizaciones.
El paciente se encuentra en tratamiento con Mitotato, glucocorticoides sistémicos y mineralcorticoides.

Comentario final: El carcinoma suprarrenal (1) es un tumor maligno poco frecuente que con frecuencia invade estructuras vecinas y desencadena metástasis. El pronóstico, en general, es malo y empeora en función del estadio, de manera que en personas con estadio IV, como es el caso de nuestro paciente, la supervivencia en 5 años es de un 4%.
La enfermedad se manifiesta por síntomas compresivos de estructuras vecinas o por alteraciones hormonales generando virilización e hipercortisolismo. También puede ser casual. El diagnóstico se basa en pruebas de imagen y su tratamiento es fundamentalmente quirúrgico, estando también indicado el tratamiento citorreductor como medida sintomática y paliativa.
Entre los fármacos utilizados en estos pacientes se puede valorar el uso de Mitotane, un fármaco adrenolítico que iniciado inmediatamente después de la cirugía, podría prolongar la supervivencia.
A pesar de que la mortalidad de este tipo de tumores es muy elevada, tenemos que confirmar que nuestro paciente forma parte del pequeño porcentaje de supervivientes a los 5 años, pues la enfermedad se le diagnosticó hace exactamente 9 años y continua estable.

Bibliografía:
1. Larrad Jiménez A. Carcinoma de la glándula suprarrenal. Cir Esp. 1 de junio de 2000;67(6):594-604.

Palabras Clave: Glándulas Suprarrenales, Pronóstico.